jueves, 21 de agosto de 2014

ARTERIOGRAFIA CEREBRAL




En qué consiste la Arteriografía Cerebral?
 La arteriografia es un examen médico de invasión mínima que usa rayos X y un material de contraste
que contiene yodo, para producir fotografías de los vasos sanguíneos en el cerebro.
En la angiografía cerebral, un tubo fino de plástico llamado catéter es insertado en una arteria de la
pierna o del brazo a través de una pequeña incisión en la piel. Usando rayos X como guía, el catéter es
desplazado hasta el área que está siendo examinada. Una vez que el catéter alcanza dicha área, se
inyecta material de contraste a través de un tubo, y las imágenes son capturadas usando una pequeña
dosis de radiación ionizante (rayos X).
La angiografía cerebral también se conoce como angiografía por sustracción digital intraarterial
(IADSA). Esta fase se refiere a la adquisición de imágenes en forma electrónica, en vez de con una
placa de rayos X. Las imágenes son manipuladas electrónicamente de manera tal que el hueso del
cráneo que aparece sobrepuesto, y que normalmente oscurece los vasos, es removido de la imagen para
obtener una imagen donde se pueden ver claramente los vasos.
Una arteriografia cerebral puede ser realizada:
para evaluar arterias de la cabeza y cuello antes de la cirugía.
para proveer información adicional sobre anormalidades vistas en una RMN o TAC de la cabeza,
tales como el flujo de sangre hacia el tumor.
para preparar para otros tratamientos médicos, tales como la extirpación quirúrgica de un tumor.
durante la preparación para el tratamiento de invasión mínima de una anormalidad en un vaso
sanguíneo.
El procedimiento también puede ser utilizado para ayudar a diagnosticar la causa de síntomas tales
como:

  • dolores de cabeza severos
  • pérdida de la memoria
  • habla con balbuceo
  • mareos
  • visión doble o borrosa
  • debilidad o adormecimiento
  • pérdida de coordinación o balance.


El Equipo

El equipo generalmente utilizado para este examen consiste en una mesa radiográfica, un tubo de rayos
X y un monitor similar a un televisor ubicado en la sala de exámenes o en un cuarto cercano. La
fluoroscopia, que convierte los rayos X en imágenes de video, se utiliza para o guiar y monitorear el
progreso del procedimiento. El video es producido por la máquina de rayos X y por un detector que está
suspendido sobre la mesa en la que yace el paciente.
Un catéter es un tubo de plástico largo, delgado, del mismo tamaño o más pequeño que un lápiz.
Otro equipo que puede utilizarse durante el procedimiento incluye la línea intravenosa (IV) y un equipo

que controla los latidos cardíacos y la presión arterial.

De qué manera funciona el procedimiento

Los rayos X son una forma de radiación, como la luz o las ondas de radio. Los rayos X pasan a través
de la mayoría de los objetos, incluso el cuerpo. Una vez que se encuentra cuidadosamente dirigida a la
parte del cuerpo a examinar, una máquina de rayos X genera una pequeña cantidad de radiación que
atraviesa el cuerpo, produciendo una imagen en película fotográfica o en detector especial.
Los rayos X son absorbidos por diferentes partes del cuerpo en variables grados. Los huesos absorben
gran parte de la radiación mientras que los tejidos blandos, como los músculos, la grasa y los órganos,
permiten que más de los rayos X pasen a través de ellos. En consecuencia, los huesos aparecen blancos
en los rayos X, mientras que los tejidos blandos se muestran en matices de gris y el aire aparece en
negro.
Hasta muy recientemente, las imágenes de rayos X se han mantenido como copia impresa en película
(muy similar a un negativo fotográfico). Hoy en día, la mayoría de las imágenes son archivos digitales
que se almacenan electrónicamente. Estas imágenes almacenadas son de fácil acceso y a menudo se
comparan con las imágenes actuales de rayos X para el diagnóstico y la administración de
enfermedades.
La fluoroscopía utiliza un haz continuo o pulsada de rayos X para crear una secuencia de imágenes que
se proyectan en una pantalla fluorescente o en un monitor similar a un televisor. Al utilizarse con un
medio de contraste oral, que define claramente el área a examinar haciéndola aparecer obscura, esta
técnica especial de rayos X posibilita al médico ver las articulaciones y los órganos internos en
movimiento. Las imágenes sin movimiento también son capturadas y almacenadas en película o
electrónicamente en una computadora.

Cómo se realiza el procedimiento?

Este procedimiento a menudo se realiza en pacientes ambulatorios. Sin embargo, algunos pacientes
podrían necesitar internación en el hospital luego del procedimiento. Sírvase consultar con su médico
sobre si será internado o no.
Antes de que le realicen el procedimiento, es posible que se haga un análisis de sangre para determinar
si los riñones están funcionando bien y si la coagulación sanguínea es normal.
Debido a que el angiograma cerebral y el período de recuperación pueden durar varias horas, se le
pedirá que vacíe su vejiga antes de que comience el procedimiento.
Una enfermera o un tecnólogo coloca una línea intravenosa (IV) en una vena de la mano o el brazo para
administrar la medicación sedante en forma intravenosa. Se podría usar sedación moderada. Como
alternativa, es posible que le den anestesia general.
En niños hasta en la adolescencia media, la angiografía cerebral se realiza usualmente con el paciente
bajo anestesia general.
Los dispositivos para controlar el latido cardíaco y la presión arterial estarán conectados al cuerpo.
Se ubicará sobre una mesa de examen.
Su cabeza se mantendrá en posición usando una correa, cinta, o un soporte de espuma para la cabeza, de
manera tal que no pueda moverla durante el procedimiento.
Se rasurará, esterilizará y cubrirá con un paño quirúrgico la zona del cuerpo en donde se colocará el
catéter.
El médico dejará insensible la zona con un anestésico local.
Se hace en la piel un pequeño corte en la zona.
Usando la guía por rayos X, un catéter (un tubo hueco de plástico, largo y fino) es insertado a través de
la piel dentro de un vaso sanguíneo y es guiado hasta el área a ser examinada.
El material de contraste es entonces inyectado a través del catéter. Una máquina especial, llamada
inyector de poder, es utilizada para administrar el material de contraste a una velocidad y volúmen
precisos. El inyector está conectado al cáteter para lograr este propósito. Cuando el material de
contraste alcanza los vasos sanguíneos que están siendo examinados, se toman varios grupos de rayos X.
Al final del procedimiento, se quitará el catéter y se aplicará presión para detener cualquier sangradura.
La abertura realizada en la piel se cubrirá luego con un vendaje. No es necesario suturar.
Posiblemente se le quita la línea intravenosa.
El procedimiento se completa usualmente en un período de entre una a tres horas. Tiempo adicional
puede ser requerido para la preparación del examen, la organización y el cuidado luego del
procedimiento.